Australia prepara fondo de u$s 780 M para minerales críticos
o.- El país busca garantizar el suministro a sus aliados mediante acuerdos de ventas futuras y no a través del almacenamiento físico de materiales.
Australia avanza en la formulación de su primera reserva estratégica de minerales críticos, con un fondo estimado de 1.200 millones de dólares australianos (u$s 780 M), orientado a proteger las cadenas de suministro globales ante interrupciones geopolíticas y comerciales.
Según fuentes del sector citadas por la industria, el grupo de trabajo sobre minerales críticos del gobierno australiano ha intensificado sus consultas con mineras y desarrolladores de proyectos, con el objetivo de presentar recomendaciones finales antes de fin de año.
El plan busca establecer una reserva basada en acuerdos de venta futura, en lugar de acumular físicamente los minerales, una estructura que permitirá a las mineras vender parte de su producción anticipadamente a gobiernos o consumidores aliados, especialmente a Estados Unidos, Japón, Corea del Sur y la Unión Europea.
Una reserva que funcionará como instrumento financiero
Fuentes cercanas al proceso explicaron que el modelo australiano se asemejará más a un mecanismo financiero que a un almacenamiento físico de metales, garantizando volúmenes de suministro a largo plazo mediante contratos bilaterales.
“Es más como un instrumento financiero que una reserva física”, señaló una fuente involucrada en las conversaciones.
La iniciativa se centrará principalmente en tierras raras y minerales estratégicos —como litio, níquel, cobalto, grafito y vanadio—, considerados esenciales para la transición energética, la fabricación de semiconductores y el desarrollo de inteligencia artificial.
El Ministerio de Comercio y el Ministerio de Recursos de Australia esperan que la reserva esté operativa en el segundo semestre de 2026, y han reiterado su compromiso de actuar como facilitador entre productores y consumidores globales.
Respuesta a la dominancia china en tierras raras
El anuncio ocurre en un contexto de tensión geoeconómica creciente, luego de que China endureciera sus restricciones de exportación de tierras raras, materiales que domina con más del 90% de la producción y procesamiento mundial.
Esta situación ha impulsado a los países aliados de Occidente a diversificar su abastecimiento de minerales críticos, considerando a Australia como un proveedor clave y estable.
El primer ministro Anthony Albanese y el presidente estadounidense Donald Trump sostendrán una reunión bilateral el 20 de octubre en Washington, donde se prevé que el tema de los minerales críticos sea uno de los puntos centrales de la agenda energética y tecnológica.
“Tenemos vastos recursos que el mundo necesitará para descarbonizarse, construir centros de datos y procesar inteligencia artificial”, afirmó el ministro de Comercio australiano, Don Farrell, en declaraciones a la emisora ABC.
“Necesitamos una amplia gama de clientes que aporten capital para extraer los productos y garanticen mercados estables para su compra”, agregó.
Un modelo de bajo riesgo financiero y alto valor estratégico
A diferencia de Estados Unidos —que ofreció apoyo financiero directo a MP Materials—, Australia buscaría minimizar su exposición fiscal, dejando que los países compradores suscriban precios mínimos o contratos de suministro a futuro.
“En un mundo ideal, Australia no gasta dinero y actúa más como un facilitador, de modo que los países consumidores aseguren los precios mínimos”, explicó una fuente de la industria.
El gobierno también evalúa crear un índice de precios “occidental” para las tierras raras, con el fin de reducir la dependencia de los precios fijados en China, aunque expertos consideran que el mercado actual es demasiado pequeño para hacerlo líquido y estable.
Australia consolida su rol como proveedor estratégico global
El desarrollo de esta reserva de minerales críticos posiciona a Australia como un actor central en la seguridad de suministro global, especialmente en el marco de la transición energética y tecnológica.
Con amplios recursos naturales y un entorno regulatorio confiable, el país busca atraer capital extranjero, fortalecer la cooperación con sus aliados y garantizar estabilidad para las industrias de energía limpia, defensa y electrónica avanzada. (Rumbo Minero)
