¿Minería o agro? Para Milei, es minería y agro
o.- Hernán Bitar. En medio de las turbulencias cambiarias, típicas de la temporada alta de competencia electoral, no hay que perder de vista que las elecciones pasarán y más allá de los resultados, el gobierno libertario de Javier Milei propone un cambio en la matriz productiva que va más allá del 2027 y busca quitarle peso relativo a la agroindustria.
De acuerdo a los últimos datos oficiales del Banco Central de la República Argentina sobre el balance cambiario e ingreso de divisas, se desprende que, entre 2020 y 2024, la agroindustria, junto con el sector minero, son los únicos aportantes netos de divisas en Argentina.
Es decir, sumando exportaciones y restando importaciones, estos dos rubros de la economía, son los únicos que tienen saldo a favor.
Más aún, con liquidaciones netas por más de US$ 177.000 millones, la agroindustria aportó el 92% de las divisas netas en el último lustro. El campo con sus riesgos climáticos (sequías, inundaciones), retenciones y presiones, aportó USD 92 dólares de cada $100 que ingresaron al país.
Por su parte, la minería aportó $14.987 millones de dólares, una cifra para nada despreciable, en una economía a la que le cuesta generar dólares.
Dólares más allá del FMI
Además, si se revisan los datos de la balanza energética, el cambio a partir del impulso a Vaca Muerta y las inversiones en distintos proyectos mineros, el aporte neto de divisas del sector energético pasó de un saldo negativo de US$ -4.552 millones en 2022, a un superávit de liquidaciones por primera vez desde el año 2009, con un saldo positivo de USD 2.624 millones de dólares.
El gobierno de Milei, más allá de las formas, comprendió casi de entrada que los 2 principales motores de la economía argentina son el agro y el sector energético, con fuerte impulso minero. No hay competencia, sino complementariedad y necesidad de que los dos rubros generen la mayor cantidad de dólares posibles.
El RIGI, pieza clave:
Sólo en minería, los proyectos formalmente adheridos al RIGI y a la espera de su aprobación final son 6 y prometen inversiones por casi USD 9.300 millones de dólares, entre ellos:
-Galan Lithium Limited, proyecto de litio “Hombre Muerto Oeste” en Catamarca. Inversión US$ 228 millones de dólares.
-Posco Argentina S.A. proyecto de litio Sal de Oro, ubicado en el Salar del Hombre Muerto, en las provincias de Salta y Catamarca. Inversión: US$ 1000 millones de dólares.
-Minas Argentinas, subsidiaria de Yamana Gold, proyecto de reactivación de la mina de oro Gualcamayo en San Juan. Inversión: US$ 1000 millones de dólares.
-McEwen Copper, megaproyecto de cobre Los Azules en Calingasta, Salta. Inversión estimada de US$ 2.700 millones de dólares.
-Río Tinto, proyecto de litio en el Salar del Rincón, Salta. Inversión US$ 2700 millones y también proyecto “Sal de Vida” en Catamarca con una inversión de US$ 638 millones.
-Ganfeng Lithium, proyecto de litio ubicado en el Salar de Llullaillaco, Salta. Inversión de US$ 790 millones.
Si se suman los proyectos ya aprobados y en construcción, no puede olvidarse que el primero fue el “Parque Solar El Quemado en Las Heras”, con una inversión de US$ 211 millones de dólares con YPF Luz, como inversor.
A este proyecto hay que sumarle inversiones en “Vaca Muerta Oleoducto Sur” (USD 2.486 millones); Planta de licuefacción de gas natural en el Golfo de San Matías, Southern Energy (USD 6.878 millones); Planta de carbonato de litio en Salta por Río Tinto (USD 2.724 millones ) y la Planta de producción de acero en San Nicolás por SIDERSA (USD 296 millones).
Con todo, el RIGI volcaría casi USD 22.000 millones de dólares sólo concepto de inversiones.
Por esto, es que más allá de los tiempos y las urgencias por engrosar reservas post acuerdo con el FMI, no sorprende que el gobierno libertario haya anunciado una rebaja en las retenciones al sector agroexportador y hasta prometido eliminarlas por completo en 2027.
Para que el esquema sin retenciones sea sustentable, deben avanzar las inversiones y proyectos energéticos que ingresaron al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).
Mientras transita las turbulentas aguas electorales, el modelo Milei propicia una cambio de paradigma en la economía, que pasa por quitarle preponderancia al agro en la generación de dólares y que el esfuerzo sea compartido con el sector energético.
Los que se suban a la ola a tiempo, seguramente gozarán de los beneficios más temprano que tarde. Mendoza, sin dudas es una de las provincias que deberá aprovechar este nuevo impulso. Veremos si la consumada alianza política entre Cornejo-Milei, termina por prender el motor de la minería cuánto antes.
(memo)
