China limita nuevas plantas de alúmina para frenar sobrecapacidad y caída de precios
o.- El gobierno de China ha dado un paso firme para contener el exceso de capacidad en el mercado de alúmina, con nuevas reglas que restringen la construcción de plantas en zonas contaminadas y exigen a los desarrolladores asegurar el suministro de bauxita, el mineral base para su producción.
Este movimiento, anunciado por el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT) en su plan para el desarrollo de la industria del aluminio 2025-2027, refleja una estrategia más disciplinada en el principal mercado mundial de metales, afectado por una sobreoferta persistente que ha desplomado los precios.
Prohibición de nuevas plantas en zonas contaminadas
Las nuevas directrices prohíben explícitamente la construcción de proyectos de alúmina en regiones con alta contaminación ambiental. Con esto, el gobierno chino refuerza su compromiso con la sostenibilidad industrial y la mejora de la calidad del aire, mientras canaliza las inversiones hacia zonas con menores riesgos ambientales.
Además, los nuevos proyectos deberán, “en principio”, contar con suficiente suministro de bauxita para garantizar su operación, una medida similar a la ya implementada en el sector de fundición de cobre. Esto obliga a las empresas a integrar verticalmente su cadena de suministro y depender menos de las importaciones.
Una medida frente al exceso de capacidad
Pese a múltiples promesas anteriores de contener la expansión ciega en la industria de la alúmina, China ha visto una creciente capacidad instalada que supera con creces el crecimiento de la demanda. Esto ha provocado un aumento en las exportaciones del mineral en los últimos meses.
Solo en 2024, se planifican alrededor de 10.3 millones de toneladas de nueva capacidad, según Aluminium Corp. of China Ltd. (Chalco), la mayor productora estatal del país. Este incremento se produce en un contexto de estancamiento del consumo interno, lo que anticipa un mercado en superávit para este año.
Reforzar el suministro local de bauxita y el reciclaje de aluminio
China también buscará aumentar entre 3% y 5% sus recursos domésticos de bauxita hasta 2027. Aunque actualmente depende en gran parte de importaciones provenientes de países como Guinea y Australia, el objetivo es disminuir esa dependencia externa y fortalecer la seguridad del suministro.
En paralelo, el plan contempla elevar la producción de aluminio reciclado a más de 15 millones de toneladas, una meta ambiciosa que subraya el enfoque del país hacia una economía circular y la reducción de residuos industriales.
Impacto en el mercado global
El endurecimiento de estas normas podría tener implicaciones más allá de las fronteras chinas. Al limitar la expansión de la capacidad, se espera que el mercado global de alúmina se estabilice gradualmente, reduciendo la presión bajista sobre los precios. Para países exportadores de bauxita y productores de aluminio, estas políticas representan un cambio estructural en la demanda china.
Por otro lado, se anticipa una mayor competencia por activos de bauxita en el extranjero, ya que las empresas chinas buscarán asegurar el suministro para cumplir con los requisitos de los nuevos proyectos.
Perspectiva para la industria
Aunque restrictiva, la medida podría mejorar la salud financiera del sector a largo plazo. Un entorno con menor sobrecapacidad permite márgenes más estables, inversiones más inteligentes y menor huella ambiental. Además, las empresas con acceso a materias primas propias se verán fortalecidas frente a competidores más dependientes de insumos externos.
Desde la óptica minera, esta política también podría incentivar nuevas exploraciones de bauxita dentro de China y en otros países, con beneficios económicos y tecnológicos asociados (Minería en línea)